O III Congresso Ibero-americano de Filosofia realizar-se-á na cidade de Medellín, Colómbia, na sede da Universidade de Antioquia, de 1 de julho a 5 de julho de 2008. Espera-se a participação de mais de 1.000 filósofos, provenientes de todos os países da América, da península Ibérica e de alguns países da Europa, para debater os problemas da sociedade contemporânea.
O tema central do Congresso é o problema do pluralismo. Numa entrevista sobre o Congresso, o seu coordenador-geral, professor Francisco Cortés Rodas, justifica a escolha do tema, sublinhando a sua importância no mundo actual, e esclarece o que é o pluralismo, nestes termos
[negritos meus]:
Hoy nosotros somos testigos del renacimiento de la controversia que ya desde el inicio de la filosofía en Grecia ha enfrentado a los más importantes filósofos desde Platón y Aristóteles, Descartes, Kant, Hegel, Wittgenstein y Heidegger, entre el universalismo y el relativismo. El relativismo niega que la ética pueda decirnos la verdad sobre lo que debemos hacer o cómo debemos vivir y niega que pueda haber principios de conducta universales que deban recomendarse a todos los seres humanos racionales. El universalismo absolutista afirma que existen valores universales con independencia de las culturas particulares. Contra la pretensión del universalismo absolutista se ha aducido que los valores universales son no solamente un concepto occidental específico, sino también, un instrumento de dominación política y cultural. Esta crítica al universalismo puede ser justa y puede ser cierto que la retórica de los valores universales sirve a veces para ocultar las pretensiones de una cultura de dominar a otras. Pero es posible que esa crítica sea injustificada y que la acusación de dominio colonial sea empleada ideológicamente para ocultar los intentos de las culturas particulares para conseguir una dominación y opresión sin límites de grupos de la propia población. Así, las dos posturas conducen a posiciones muy problemáticas. Mientras que el relativismo cultural conduce a consecuencias inaceptables para quien pretenda defender un orden racional, la postura contraria que defiende la existencia de valores universales cognoscibles con independencia de las culturas particulares, resulta contradictoria. Frente a esta situación, una de las preguntas filosóficas básicas es la de si puede haber una base mínima de criterios comunes para que dos o más culturas se comuniquen.
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Texto bem consistente,mas acredito que há valores universais que se sobrepõem aos valores particulares.
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